Mi último trabajo en Gibraltar

Mis últimos años en la colonia de Gibraltar como trabajador transcurrieron desde el año 1996 hasta el 2004 y más concretamente el mes de agosto de ese año. En este trabajo comencé a trabajar, ya que yo llevaba un cierto tiempo desempeñando funciones en un puesto de la empresa Alberto Latín con el cuál estuve solamente varios meses. Y el dueño de la empresa Sanguinetti S.L. me veía todos los días, ya que él su hija y su esposa tenían un par de puestos de productos congelados y varias neveras grandisimas, y poco a poco me fue conociendo y llegó el momento en que me ofreció trabajar con él en su empresa, a lo cuál yo accedí al poco tiempo.

Por tanto a principios del año 1996 formalicé el contrato con la empresa Sanguinettí S.L.y con ellos me mantuve hasta el año 2004 en que dí yo mismo terminado el contrato.

 Dicho trabajo se encontraba en el Mercado de Gibraltar, edificio que tiene bastantes años de construcción y se encuentra a un lado de la puerta de la muralla que da acceso a lo que es el centro ya de Gibraltar.

Realmente el tiempo que estuve con ellos aprendí bastantes cosillas y la verdad me llevaba bastante bien, especialmente con mi jefe Alberto Sanguinetti. Con su hija Cristiane y con su madre Johan también había cierta relación, aunque un poquito más distante. Con el otro empleado que trabaja con ellos, que su función era realmente la de conducir la furgoneta y de llevar en el coche a cualquier lugar al resto de su familia, pues realmente me llevaba bien también. Al poco tiempo de estar trabajando, este chico que trabajaba con ellos lo despidieron porque lo cogieron en cierta ocasión vendiendo cajas de una de las neveras grandes que tenían Alberto Sanguinetti a otra empresa. Por tanto al haber un hueco en la empresa y habiendo una necesidad de que hubiera un conductor, pues yo mismo hablé por un amigo que en ese momento se encontraba desempleado. Este amigo se llamaba y me imagino que se seguirá llamando Juán, ya que hace algunos años que perdí la buena relación que tenía con él y su esposa que se llama Toñi, muy amiga de mi ex-mujer.

En muchas ocasiones para ir al trabajo, pues en vez de ir en bicicleta como siempre había ido yo, pues tuve la fortuna de que este amigo Juan me llevaba en su coche. Este amigo después de que yo me fui de la empresa Alberto Sanguinettí durante un par de años siguió trabajando con ellos, hasta que tuvo que dejarlo por el motivo de que le encontraron un cáncer y casi a la misma vez a su esposa, al poco tiempo ambos gracias a dios lograron pasar satisfactoriamente su enfermedad, aunque claro con ciertas secuelas ya para siempre.

Seguimos hablando de Gibraltar

Como ya mencioné en mi primer post hablando sobre el tema de mi trabajo en Gibraltar, quiero comentar que el trabajar allí me supuso un gran alivio económico, ya que anteriormente y durante varios años estuve trabajando en una carnicería en La Línea de la Concepción. Las condiciones laborales en este empleo realmente no eran muy buenas, por tanto después de pensármelo en varias ocasiones, un día me decidí y fui a la Roca haber si encontraba algún empleo que tuviera mejores condiciones laborales. Y ciertamente fue así, ya que al segundo día de buscar por la Roca, por fin encontré un trabajo que merecía la pena el poder desarrollarlo.

 

Me acuerdo que el trabajo que encontré me vino como anillo al dedo, y además vine en el momento propicio, ya que el señor que llevaba dicho establecimiento había tenido un percance y se había cortado con un cuchillo un nervio de la pierna. Por tanto el padre que era el señor que llevaba el establecimiento mientras su hijo se ponía mejor, me dijo que necesitaba a alguien para trabajar allí con su hijo. Yo acepté las condiciones que me propuso, y al cabo de unos días comencé a trabajar en dicho comercio, que no era ni más ni menos que un establecimiento de productos congelados, desde productos cárnicos hasta pescados congelados, verduras, etc.

 

Durante más de seis años me mantuve en dicho puesto de trabajo, y la verdad que lo ganaba bastante bien, comparándolo a como estaban los sueldos en nuestra España de los 90´. En muchas ocasiones ejercí como encargado del establecimiento, es decir yo me encargaba de abrir y cerrar el local y además de tomar los pedidos, etc.

 

Pero como todas las cosas, todo tiene un principio y un final, y así fue que después de mas seis años, pues por circunstancias de escasez de trabajo, mi contrato terminó, pero acabó de una manera correcta con el que era mi jefe, que recuerdo que se llamaba Charlie.

 

Después de estar unos meses sin encontrar empleo, por fin encontré otro nuevo trabajo, pero por supuesto en éste solamente estuve unos meses. En este nuevo empleo tuve que hacer en muchas ocasiones turnos con los compañeros y después me colocaron en un establecimiento para la preparación de productos cárnicos y pescados congelados.

Trabajo en Gibraltar

                                                                                                                                                                

Tengo 52 años y el próximo 17 de septiembre de 2013 se cumplirá tres años sin encontrar empleo. Al igual que otros cientos de miles de personas en España estamos dentro del grupo de los llamados parados de larga duración, y la verdad estamos parados no porque queramos estarlo, como algunas voces se han oído por ahí y proveniente del ente político, sino porque realmente no hay trabajo por ninguna parte.

En el momento que me quedé sin empleo que fué el 17 de septiembre de 2010 pensaba que no estaría mucho tiempo en esta situación. Pero ya veís la cosa se ha alargado por demasiado tiempo y parece que el final de este tunel no se ve.

Y la verdad que desde el momento que he pasado a la situación de desempleado no he parado de buscar algún tipo de empleo que pueda desarrollar, desde trabajar en la cocina, en una cafetería, como auxiliar de seguridad, en la construcción como oficial de 2ª, etc. He querido darle un giro a mi trayectoria laboral, ya que por muchos años he trabajado en temas relacionados con la alimentación, tengo una experiencia de más de 15 años de haber trabajado en varios comercios de la colonia británica llamada Gibraltar.

¡¡Cuántas veces durante unos 15 años he pasado el campo de aviación en Gibraltar, montado en mi bicicleta y aguantando el fortísimo viento a veces que se desataba por el viento del este o llamado Levante¡¡ Y todo este esfuerzo como muchos de los que nos levantavamos muy temprano para poder ganar un jornal que por aquel entonces estaba alto y por tanto se ganaba más que en España. Fueron unos tiempos la verdad de mucho trabajo y también para poder ahorrar dinero para darle a mi familia otros más caprichos, en muchas ocasiones cuando tenía que trabajar también por la tarde. Cogía de nuevo mi bicicleta y regresaba a mi casa para almorzar allí, en vez de gastarme unas libras en cualquier restaurante de Gibraltar, aunque a veces me llevaba comida para comerla allí mismo, pero eran a veces las menos.